Las empresas familiares representan 2/3 del entramado empresarial del planeta y generan entre 70 y 90% del Producto Interno Bruto mundial, indicó la experta para dar inicio a su ponencia “Empresas familiares: Cómo manejar los conflictos”.

La especialista afirmó que a pesar del contexto socioeconómico y político hostil, este no suele ser un factor determinante en los conflictos que se generan en el seno de las empresas familiares. “El germen de la destrucción está dentro de las empresas familiares, no en el entorno”, afirmó para señalar que cerca de 70% de este tipo de compañías desaparece en la transición de la primera a la segunda generación.

Las disputas familiares se agudizan en una organización de esta naturaleza cuando las reglas de juego no están claramente definidas y no hay instancias eficientes en la toma de decisiones.

Monteferrante indicó que en una sociedad de este tipo coexisten dos culturas totalmente diferentes como la familiar y la corporativa. La primera basada en emociones y recuerdos y la segunda en resultados.

El gobierno empresarial es una pared de contención en las firmas familiares, afirmó para señalar que en la medida que se mantenga vigente la figura del fundador los conflictos tienden a resolverse más fácilmente mientras ejerza el poder. En su ausencia, las decisiones se toman a nivel del consejo familiar.

En Venezuela, la mayoría de las empresas familiares está en transición, acotó.

Entre las recomendaciones de la especialista, a quienes se encuentran en un dilema ante el escenario de fuerte crisis que se vislumbra para 2016, está la de mantener operaciones. “Estamos en una carrera y cuando estás por llegar ¿Te vas a devolver?”, preguntó.

Explicó que eso es el capital paciente, el que se invierte a largo plazo independientemente del entorno económico, social y político. La apuesta es a permanecer, a trascender en el tiempo.