Ecarri indicó que «se trata de una medida desproporcionada y desmedida que atenta contra los pequeños comerciantes que hacen vida en las 22 parroquias de Caracas. El alcalde Jorge Rodríguez pretende ahorcar a los negocios menores con estas tarifas desmedidas».
Insistió en que es necesario revisar el aumento que asciende a 600 % de la tarifa que pagaban las empresas y en 300 % el incremento en los montos residenciales dentro del municipio Libertador. «El servicio es deficiente como para que ahora aumenten irracionalmente las tarifas. No cuentan con las unidades apropiadas para prestar un buen servicio ni el personal suficiente. En cada esquina del municipio Libertador vemos montones y montones de basura. ¿Ese es el servicio que pretende cobrarle a los caraqueños como si fuese un servicio de primer mundo?»
Por su parte, la concejal Maribel Castillo explicó que el decreto 175, firmado por el alcalde Jorge Rodríguez no fue consultado ante la cámara municipal impidiendo que los ediles pudiesen tomar acciones que favorecieran a los caraqueños y detuvieran el irracional incremento.
Para Ramón Pérez, comerciante de la parroquia Altagracia, el aumento va en contra directamente de los pequeños comerciantes. «Nosotros pasamos de pagar 200 bolívares fuertes a más de 1.200 bolívares. Nadie puede subsistir con esos montos, solo los más grandes a quienes no les importará cuánto paguen por la recolección de desechos sólidos. No nos negamos a al incremento, pero si pedimos que rectifiquen la medida que nos afecta a todos».