El Grupo de Contacto Internacional (GCI) que busca soluciones a la Crisis en Venezuela analiza en San José de Costa Rica lo sucedido durante los últimos días en el país y discutirá sus próximos pasos, luego de evaluar su actuación en los primeros 90 días. Expresó en sus redes sociales (@anibalsanchez) Aníbal Sánchez el Analista y Consultor Político. Este escenario y foro discute a partir de visiones bastante disímiles de sus integrantes, no es la misma la de Alemania que Bolivia “país que no firmó resolución anterior” en el grupo está también Uruguay, Mexico, Ecuador, España, Francia, Holanda, Italia, Portugal, Reino Unido, Suecia y Costa Rica; sobre la situación venezolana.
Sanchez, recordó que cuando se creó el GCI en Montevideo, el 7 de febrero, se asignó un plazo de 90 días para trabajar, y transcurrido el tiempo se evaluaría su desempeño “esta semana vence el plazo”. El encuentro adquiere un tinte especial, a raíz de los sucesos de la semana pasada en Venezuela. El GCI emitió una declaración en mayo, en la que reiteró su apoyo a una solución “política, pacífica, democrática y venezolana a la crisis, en el marco de la Constitución” y se opone al uso de la fuerza. “Los derechos humanos y las libertades civiles de todos los venezolanos deben ser respetados; los miembros de la Asamblea Nacional y líderes de partidos deben poder llevar a cabo su trabajo sin temor a represalias; la libertad de los medios de comunicación debe restablecerse y los presos políticos deben ser liberados”, citaba el pronunciamiento.-
Adicional a esto se suma la intención de los cancilleres del Grupo de Lima quienes han manifestado su intención de intercambiar visiones con el GCI. “Las visiones pueden tener sus diferencias” para el GCI en Venezuela la situación es confusa, ya que los grupos no puede ver sus objetivos, y en el medio tienen a una población que sufre; y sostiene que es necesario un “diálogo que conduzca a un acuerdo político, que permita una salida soberana, pacífica y democrática de la crisis”. A ellos les preocupa llamados y una aprobación para una intervención internacional, agregó.-
Desde la primera cita (febrero) en Montevideo, Uruguay pidió formalmente elecciones en Venezuela. “Siempre el objetivo del GCI ha sido forjar un enfoque internacional común para apoyar una resolución pacífica, política, democrática y de propiedad venezolana, excluyendo el uso de la fuerza; a través de elecciones presidenciales libres, transparentes y creíbles, de conformidad con la Constitución venezolana”, esto habría un debate en cuanto a las garantías y condiciones en que se podían desarrollar estos comicios “pero acá en venezuela esto sonaba contradictorio a la ruta fijada desde la asamblea, pues parte desde el cese…”
El GCI se volvió a pronunciar en marzo tras una cita en Quito. En esa oportunidad, llamó a “respetar la imparcialidad, neutralidad e independencia de la ayuda humanitaria” y a “restaurar la plena democracia y el orden constitucional de Venezuela de una manera pacífica, comenzando por el respeto al mandato constitucional de la democráticamente electa Asamblea Nacional”. A su vez, se comprometía a trabajar una hoja de ruta para convocar nuevas elecciones; “éstas dos declaraciones no fueron firmada por Bolivia”.-