“Poco optimista” se mostró el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, ante la posibilidad de que Gobierno y oposición retomen el dialogo político como alternativa para resolver la grave crisis que atraviesa el país, sin embargo aseguró que el oficialismo teme un estallido social y por ello está insistiendo en la negociación.
Recalcó que en esta oportunidad los representantes del oficialismo están participando en las conversaciones porque “tienen el sol en el cuello”, en ese mismo orden de ideas dijo que la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) asistió al encuentro en República Dominicana para plantear “los puntos que el país quiere. No lo que quiere la MUD sino qué queremos la mayoría de los venezolanos”.
Dijo que a su juicio el tema central de las conversaciones debe ser buscar “una solución a la crisis, a la peor crisis que ha vivido Venezuela en toda su historia”. Por lo cual, para que este proceso no sea “otro fracaso” deben incorporarse como facilitadores otros países.
“Siempre he dicho que la única posibilidad de que el diálogo sea serio y no otra estafa es incorporando gobiernos democráticos, quitando responsabilidad a los mediadores que fracasaron el año pasado. Caso Rodríguez Zapatero y Leonel Fernández”, dijo en declaraciones a la prensa durante un acto en el estado Miranda.
Capriles señaló que el Gobierno ha pedido incluir en el proceso de diálogo representantes de Bolivia y Nicaragua mientras que la oposición ha solicitado que se incluyan funcionarios de México y Chile. Además de mediadores de países europeos y representantes de la iglesia.
“El propio Secretario General de la ONU ha sido un promotor de una salida para Venezuela. También se habló de tres países europeos (Francia, Portugal y Grecia), además de la iglesia. Eso me parece que es una rendija de esperanza para que el diálogo no sea otra estafa que traiga más desesperanza a los venezolanos”, manifestó.
Según la opinión de Capriles al Gobierno “no le importa la vida de los venezolanos”, pero es el principal interesado en que se produzca una negociación porque teme un “estallido social”.
Destacó que “a lo interno (del Gobierno) hay debates porque temen que la situación económica se siga agravando. Además que la comunidad internacional ya es un bloque que incluso no está dispuesto a prestarle plata a Maduro”.