Una gran actuación de los forasteros Jack Michael Martínez y Leandro Garciamorales en los cinco minutos de alargue tras concluir el período regular con igualdad a 92 fue clave para la conquista ya que hasta la mitad estaban por debajo 47 a 41. En este lapso adicional los porteños no contaron con Héctor “Pepito” Romero, quien salió por límite de faltas.
Con este título en el baloncesto la capital de Venezuela se convierte en la primera ciudad que en un mismo año se apunta los tres galardones de los tres deportes profesionales más importantes del país.
A saber, los Leones el béisbol, Caracas FC en el balompié y los saurios en el basketball. Por cierto, el equipo filial de la organización caraqueña también alcanzó el campeonato en la naciente Liga Especial en el deporte de las mallas y los aros.
El cotejo se disputó a casa llena en el gimnasio José Beracasa del Parque Naciones Unidas y se convirtió en revancha ya que hace 12 meses los mismos nautas salieron victoriosos en esa sede ante los propios Cocodrilos en el séptimo choque.
Los de Néstor Salazar se fueron abajo en el marcador para la primera mitad perdiendo 41-47 frente al acorazado, pero los locales no bajaron los brazos y salieron con una ofensiva explosiva llena de rapidez por intermedio del «Zancudo» Centeno y Garciamorales para tomar el frente en el marcador.
Marinos no pudo reaccionar ante la inspiración de Cocodrilos y cayó en el juego de las faltas, perdiendo en el 4to cuarto a «Pepito» Romero por acumulación de personales y a Donta Smith por la misma vía.
Todo parecía sentenciado pero Edgar Lugo y Axiers Sucre protagonizaron la última jugada del 4to cuarto, robando el balón y convirtiendo una bandeja de dos puntos que igualaba las acciones y mandaba a tiempo extra el juego.
El tiempo extra sólo tuvo un dueño, Cocodrilos de Caracas se apoyó en Luis Bethelmy quién empujó la ofensiva y le dio la confianza a Garcíamorales y Centeno para manejar las riendas de los últimos segundos y concretar la victoria de los saurios.
Marinos vendió cara su derrota y le entregó el título de campeón a Cocodrilos en una serie donde le arrebató dos triunfos en la «Caldera del Diablo» y alargó el sexto juego en Caracas hasta el tiempo extra.