El máximo representante del clero barquisimetano, insistió en el hecho de que los sacerdotes deben ser pastores de todos y no de una tolda política.
Al contrario, expresó que «expresar vivas a favor del Gobierno» o de cualquier partido, además de ser irrespetuoso a los ojos del Señor, sólo promueve conflictos entre la propia feligresía. En este sentido, exhortó al ministro de Dios a «que reflexione sobre su conducta» y así evite una posible sanción canónica que pudiera suspenderlo del ministerio sacerdotal.
El padre Rojas ya recibió una primera amonestación. Dentro de poco, me entrevistaré con él a objeto de llamarlo a la reflexión y hacerle entender que somos pastores de la Iglesia para llevar la palabra de Dios, comunicando la Buena Nueva desde la concordia y amistad con el Señor y los hermanos. El partidismo político no tiene cabida en la religión.
De concretarse la sanción canónica, la suspensión del ministerio sacerdotal puede ser durante un tiempo determinado o incluso de forma definitiva. Sin embargo, el arzobispo indicó que lo ideal es evitar medidas tan extremas como esa y, de diversas maneras, propiciar un auténtico servicio en el altar.
«El Evangelio nos invita a ser comunicadores de la voluntad de Dios; a ejercer el sacerdocio de una manera santa mediante la sagrada eucaristía y no involucrando la política o ideas radicales que van en contra del bienestar de nuestros fieles. Ante los ojos del Padre, todos somos iguales y así debemos permanecer siempre», finalizó.
dd / Reporte360