Tomando en cuenta el precio de la lata de leche en polvo fijado por el Gobierno en 36,44 bolívares, los buhoneros han aplicado un incremento de 448,85% a este producto.
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Los buhoneros ya no gritan los precios de los productos que venden en el casco central de Maracaibo. Entre Las Playitas y el centro comercial Plaza Lago se concentran las ventas ilícitas de los alimentos regulados.
Los comerciantes informales miran a quien pregunta por un sobre o lata de leche en polvo. Sobre sus mesas se exhibe arroz a Bs.30, azúcar a 25, aceite a 60, harina a 50 y la leche tiene la ubicación principal al ofertarla a 200 bolívares.
Una lata de 900 gramos de leche en polvo, completa, trepa los aumentos más “descarados, una estafa”, asegura Milagro Reyes, ama de casa de 47 años, que ayer salió sorprendida de la calle comercial donde se concentran más de mil mesones informales.
Dijo comprar a esos precios los rubros de la canasta “por necesidad”, porque debe alimentar a su nieto que “tiene 14 años y sufre del corazón”. Le prepara su comida a tiempo, por eso no puede “pasar horas en una cola”. Para evitarlas compra “más caro” en los puestos de los comerciantes del centro de Maracaibo.
Solo en el precio del lácteo paga demás 163,56 bolívares, al compararlo con el regulado, fijado en mayo a 36,44 bolívares para la lata de 900 gramos. La escasez del producto hace que las familias paguen 448,85 por ciento más.
Marisol Hernández, comerciante de 32 años, pagó 180 bolívares por una lata de la fórmula infantil. Hacer el tetero a sus “dos muchachitas” sacude su bolsillo semanal. Señala que tiene más gastos por el incremento de los precios.
A lo interno de callejuelas que se convirtieron en mercados a cielo abierto, los compradores observan cómo los paquetes de harina de maíz son empaquetados de forma irregular. Los bultos de azúcar y café son exhibidos sin definirse el precio de venta. Solo los clientes habituales tienen la preferencia.
El Banco Central de Venezuela informó en octubre la escasez de leche en polvo. Las fallas se calcularon en 80 por ciento de los mercados ante la caída de las importaciones y desaparición de la producción nacional.
Ante la falta del producto en los anaqueles, el Gobierno aseguró la colocación y distribución de lácteo, a través de un convenio con Colombia que afirmó arribos de leche en polvo. Desde Argentina se reportaron recepciones que no terminan de satisfacer el consumo nacional que hasta 2012 se situaba en 70 litros por persona, según el Instituto Nacional de Estadística.
163,56 bolívares demás pagan las familias que compran el lácteo en el centro de Maracaibo.
Por: Yasmín Ojeda Ruiz
Diario La Verdad.