El síncope es una pérdida del conocimiento producida por causas neurológicas o por presión baja. El paciente cae inconsciente pero sigue teniendo pulso y respiración y se recupera espontáneamente o con asistencia médica.
En caso de un paro cardiaco, existe una suspensión tanto de la actividad cardiaca como de la respiratoria. Si el paciente no es sometido a una maniobra de reanimación, que en la mayor parte de los casos es exitosa, puede fallecer en un lapso menor a 10 minutos. El Dr. Cabrera indicó que luego de los 3 minutos de ausencia de respiración las posibilidades de rescatarlo son bastante lejanas.
Debido a que compromete funciones neurológicas, la persona que sufre un infarto puede sufrir de secuelas y tener una larga recuperación para retomar su vida normal, explicó.