Un informe realizado por Susan Rice, observadora sobre temas atómicos de la ONU y embajadora de Estados Unidos ante el Consejo de Seguridad, sostuvo que «Irán se niega a dirigir nuestras preocupaciones por la proliferación y parece determinada a obtener armamento nuclear».
El Consejo de Seguridad y el comité de sanciones «necesitarán considerar una apropiada respuesta a las sistemáticas violaciones de las resoluciones del Consejo de Seguridad».
Un informe del comité de sanciones indicó que sólo 36 países hasta ahora han enviado información sobre la forma cómo se están implementando las sanciones. Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia sostuvieron que son muchos más los países que deben informar de sus acciones.
Rice sostuvo que existe «una urgente necesidad de redoblar los esfuerzos para implementar las sanciones de la ONU».
«Ya hemos visto esfuerzos sin antecedentes del desafío de Irán para presionar hasta tensar al máximo la cuerda con su aproximación ambigua al tema. Los miembros deben moverse rápido para llevar adelante sus obligaciones de implementar nuevas sanciones», dijo.
Irán niega buscar una bomba nuclear. El último informe de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) indica que la República Islámica tiene cada vez más uranio de bajo enriquecimiento y 20% de uranio enriquecido.