Tras cerca de dos meses de negociación con las autoridades chinas, Google ha llevado a la practica su amenaza de no continuar ofreciendo resultados censurados y actualmente ofrece una versión en chino de su buscador desde Google Hong Kong.
Los usuarios que visitan la página web de Google en China (Google.cn) son redirigidos al portal de la compañía en Honk Kong (Google. com. hk). Hong Kong es una región autónoma dentro de China que ofrece a sus ciudadanos una libertad mucho mayor en Internet y que parece haber dejado un espacio para esta maniobra de Google.
Pese a que los argumentos de Google señalan que esta es una decisión completamente legal con la que incrementar de forma importante el acceso a la información de los habitantes de China, se espera que la respuesta de las autoridades del país asiático no se haga esperar y bloqueen el servicio en cualquier momento.
Tras dejar de filtrar los contenidos al desviar el tráfico del buscador a su sitio de Hong Kong, Google sabe que está retando a China, un país con un mercado de más de 380 millones de internautas y 1.000 millones de dólares anuales en búsquedas, y que hasta la fecha se ha mostrado inflexible en su postura acerca del control de la información.
¿Cuál será la respuesta de China? ¿Está Google tomando la decisión adecuada? ¿Cómo repercutirá todo estos movimientos en el mercado de motores de búsqueda?