Una vez recuperado desplazó como si nada de ese rol a Acie Law, quien había tomado la responsabilidad tras su lesión.
Entre los meses de diciembre y enero Vásquez empezó a verse más suelto en cancha, aún así el dueño del equipo, Michael Heisley, en febrero, dio la orden de firmar a uno de sus jugadores favoritos, el experimentado Jason Williams, de 12 años en la liga. El curtido base desplazó al criollo.
Por esos días arribó a la organización, vía cambio, el también novato Ish Smith y el técnico Lionel Hollins decidió probarlo por encima de Greivis. Afortunadamente, Williams sufrió una dolencia en la espalda y el dorsal 21 volvió a capitalizar su tiempo de juego para adueñarse en definitiva de la posición de segundo armador. En los playoffs el ex de Maryland mejoró sus números y fue parte importante de la rotación.