“No podemos permitir que un Gobierno forajido venga a ofender la dignidad del pueblo (…) a nosotros no se nos puede acusar, es una infamia, una mentira (…) que nosotros servimos de base para atropellar al pueblo venezolano”, dijo en un contacto con el canal estatal, VTV.
Venezuela rompió relaciones diplomáticas con Colombia luego de que el país vecino denunciara en la sede la OEA que Venezuela cobija irregulares de las Farc y el ELN.
“Venezuela quiere la paz con Colombia, pero no nos vamos a dejar irrespetar”, insistió el vicepresidente.
Jaua indicó que Venezuela siempre ha estado preocupada por la paz en Colombia, pero el país “no pondrá los fusiles” para tomar parte de la guerra interna que tiene el vecino.
“Somos una base, un espacio para la paz del Gobierno colombiano (…) a pesar de los costos políticos que ha tenido el presidente Chávez (…) pero de allá siempre la puñalada, la traición ’santanderiana’ de la oligarquía bogotana”, apuntó.
Reiteró que la ruptura fue con la administración uribista y no con el pueblo colombiano “con quien nos une una relación de amor, de compromiso y de lucha”.