José Domingo Blanco, @mingo_1: Venezuela 2018

José Domingo Blanco, @mingo_1: 350José Domingo Blanco, @mingo_1

José Domingo Blanco, @mingo_1: Venezuela 2018

Un zamuro espera su turno frente a la bolsa de desperdicios que revisa una familia desesperada por comer. Con una paciencia inusual el ave aguarda su momento de festín, sin miedo a los manotazos o pedradas que recibe cuando intenta acercarse antes de tiempo al envoltorio negro vuelto trizas que escupe desechos malolientes, los cuales son devorados sin reparar en su avanzado estado de descomposición. Sin asco a los gusanos o moscas que incuban su prole en cada trozo de carne podrida o de fruta fermentada. Ahora, a eso se le llama sustento.

La escena, aunque escabrosa, dolorosa y repugnante, se repite como la domesticación de un ave, que ya no les teme a los humanos y para la que se ha vuelto normal encontrar más competencia hurgando entre los desechos y la carroña. Ahora no son otros zamuros o perros sarnosos con los que comparte las sobras: son hombres, mujeres y niños famélicos, que se suman como legiones al oficio que antes solo pertenecía a los animales que se alimentan de la basura.

¿Cuánto falta para que zamuros, palomas, perros o gatos callejeros sean las proteínas que los venezolanos llevarán a sus mesas? ¿A cuántos más les arrebatará la vida la desnutrición severa antes de que este régimen acepte ese cargo de conciencia? ¿En qué momento decir “muero de hambre” dejó de ser una metáfora para convertirse en una frase auténtica?

La ciudad muestra un espectáculo doloroso y sin precedentes. Hambre, delincuencia, pobreza, enfermedades y deterioro son los atributos con los que se describe este destino turístico solo apto para aventureros y viajeros osados. Retrocedemos con cada día que pasa. Bajamos un peldaño, hora tras hora, para acercarnos más a la depauperación. Me cuesta encontrar una cara alegre. Solo veo rostros desencajados, caras afligidas y cuerpos enflaquecidos de personas que se creen sentenciadas a muerte. El venezolano, aquel que era pretencioso y bullanguero, ya no vive en este país. Los que quedamos, somos diferentes. Nos arrancaron nuestros hábitos, para imponernos nuevas rutinas impregnadas de desconsuelo. Nos confinaron a la soledad de nuestras casas, abandonadas prematuramente por los hijos y nietos que decidieron irse de Venezuela.

Veo a mis compatriotas devolver sus medicinas en la caja de la farmacia cuando el precio multiplica por mucho el saldo que tienen en sus carteras. Los encuentro arrastrando el ánimo y deambulando en busca de una comida que, en sus lugares habituales de compra, no llega. Veo gente caminando sin rumbo para hacer de su día un día más, sin mayores secuelas. Recorriendo calles grises, solitarias, vacías… muertas. Venezolanos que esperan en las paradas de autobuses un transporte que nunca llega. Negocios que luchaban contra el cierre y que hoy decidieron no abrir nunca más sus puertas. Veo muchos sueños rotos. Percibo demasiada tristeza.

Venezuela tiene otros aromas y otros colores. La fetidez es su nuevo perfume. La suciedad, su mejor fachada. La violencia, su mejor oferta. Para nadie es un secreto que el país está hundido en la pobreza extrema. Este es el verdadero legado de un gigante que, en cualquier otra nación, es motivo de risas y pena ajena. El sinónimo del fracaso. El ejemplo palpable de cómo es posible llevar a un país rico a la miseria. La fórmula de la ruina de la que otros países se alejan. Veinte años y este régimen sigue en su afán de destruir, aún más, mi amada tierra.

[the_ad id=»217728″]

Descoloridos, fantasmales, deteriorados, los edificios y casas albergan almas en pena. Se nota la redistribución de los ingresos, destinados ahora solo para poner algo de comida en las mesas. Ascensores dañados, rejas corroídas, inmuebles cuyas paredes lucen desteñidas, descascaradas, mostrando sin reparos sus manchas de humedad, filtraciones u otras huellas. Lámparas sin bombillos o con pocos alumbrando a duras penas. Jardines luciendo monte. Desfile de aguas negras. Alcantarillas rotas. Semáforos que hace mucho dejaron de hacer sus señas. Carros abandonados, vueltos chatarras, oxidados y sin ruedas… calles cada vez más solas. Abandonadas como si nadie existiera.

¿Cuándo nos volvimos Cuba, Siria, Uganda o Haití? ¿Por qué dejamos que esto sucediera? Veinte años, señores, veinte años y este régimen, muy astutamente, nos enredó en su trama, secuestró nuestros derechos y nos hundió muy hábilmente en esta tragedia. Este régimen ha sido muy audaz. Y mientras más arrinconado se siente, más radicaliza su perversión, maldad e indolencia. Afina su plan para la distribución equitativa de la pobreza. Su mejor aliada. Su jugada maestra. Pero no tardarán en presentarse rebeliones en las que el hambre hará que las miradas de los empobrecidos no se dirijan hacia las bolsas de basura negras sino, salivando, hacia las robustas figuras de quienes hoy los someten a la miseria.

Instagram: mingoblancotv




Categoria(s) de contenido(s):
Opinión
Tema(s) de Contenido(s):


Listado de las ciudades para mudarte a vivir y trabajar:

¿Quieres emigrar? Mira las ofertas de trabajo disponibles en las mejores ciudades del mundo donde mudarte a vivir y trabajar, emigrando legalmente, visita: The BestCities.work


Comparte en tus redes sociales:

Te recomendamos leer los siguientes contenidos relacionados:

Isaías Márquez: Sobre las pretensiones ilegales de ExxonMobil de apropiarse del Esequibo
Eres lo que aparentas, por Isaac M. Hernández
BRICS+: Una ampliación impresionante, por Isidoros Karderinis
Habla para que yo te vea, El poder de la radio en la comunicación política
Chevron y su flujo de divisas, por Isaías A. Márquez Díaz
El Arte del liderazgo político, Más allá de las apariencias
Isaías Márquez:  La carestía del café
Ofensiva y tensiones por el Esequibo por Isaías A. Márquez Díaz
El encuentro de los presidentes Ali-Maduro, por Isaías Márquez
Los Ejercicios militares EEUU y la tensión Guyana/Venezuela por Isaías Márquez

Sigue leyendo los temas más populares:

Síguenos en nuestras redes sociales:

instagram notiactual
twitter notiactual
Facebook notiactual
Pinterest notiactual
Telegram notiactual