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José Guerra: El dilema del presidente Chávez

     Hay gente enceguecida por el fanatismo que todavía duda que el presidente Hugo Chávez esté enfermo. Lo está y muy seriamente porque un cáncer es una enfermedad muy severa y todavía más cuando se propaga por el cuerpo, mina las resistencias y acaba con las personas.

Muy pocos conocen el tipo de cáncer que padece el Presidente, lo cierto es que la quimioterapia implica efectos colaterales para los pacientes que pueden debilitarlo y deprimirlos en algunos casos.
Hay que ser ingenuos para pensar que el llamado chavismo es una fuerza homogénea. Todo lo contrario, allí están representadas corrientes diversas y contradictorias. Por ello el difunto general Müller Rojas dijo que “el Psuv era un nido de alacranes”. El único y exclusivo factor que mantiene a ese partido unido es el liderazgo del presidente Chávez, así de simple. Fuera de Chávez en ese partido no hay liderazgo propio. Eso es evidente. Lo que era una ventaja, hoy es una tremenda desventaja. Por tanto, para que el partido se mantenga unido Chávez debe sostener su activismo y liderazgo. Igual pasa con el Gobierno. No existe un ministro que se comunique con el país de forma creíble y ninguno de los integrantes del tren ministerial tiene reputación. Ello ha forzado al Presidente a tener que dedicar un esfuerzo enorme a la dirección de un gobierno que sin él se deterioraría aceleradamente. Pero lo que es bueno para el partido y el Gobierno ahora es malo para la salud de Hugo Chávez como ser humano que sufre y padece y que también, como todos, le teme a la muerte. Ese temor es lo que hace que el Presidente invoque permanentemente a Dios todopoderoso.
Ahora bien, si el Presidente opta por dedicarse al partido y a las exigentes funciones de gobierno y a competir en la dura campaña electoral que se acerca, puede ver comprometida muy seriamente su salud y las posibilidades de sobrevivir al cáncer. Sería suicida para la persona de Hugo Chávez seguir la conseja de que el mejor candidato presidencial del Psuv es un Chávez enfermo. Si decide correr ese riesgo, es porque no hay una generación de relevo que cubra su ausencia, la cual ocurrirá tarde o temprano. Planteadas así las cosas, lo mejor para Chávez como ser humano es que dé prioridad a su recuperación plena y completa, y si no puede ser un candidato debilitado, que preserve su vida.
Economista
José Guerra: El dilema del presidente Chávez was last modified: agosto 10th, 2011 by
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