La especie es uno de los principalesatractivos de la isla, por lo cual se toman todas las medidas para facilitar el viaje de estos crustáceos que con su característico color, ofrecen un bello paisaje en los caminos del remoto arrecife.
Habitualmente el hogar de los cangrejos es en el bosque. Sin embargo, cada mes de diciembre emprenden el viaje que dura alrededor de una semana, el que tiene término con el apareamiento de estas especies en la playa.
Las hembras quedan por dos semanas incubando los huevos, hasta que los dejan en el mar donde luego de un mes después de nacer vuelven al bosque por el mismo camino que hicieron sus padres.
Lamentablemente, esta tradicional travesía está en peligro debido a la gran influencia de la lluvia en la expedición, la que se ha vuelto irregular con el cambio climático y podría arriesgar el desarrollo de esta especie.
Agencias