Un vecino de la calle Mathewson de Einfield (en Connecticut) llamó a la Policía de la zona “alarmado” por la presencia de 15 zombis en biquini, según la prensa estadounidense.
Las chicas estaban haciéndose fotos y no comiendo cerebros, lo que restó algo de dramatismo a la situación. Al parecer, todo era una puesta en escena para elaborar un calendario y las chicas, lejos de ser muertas vivientes, solo estaban maquilladas.
De modo que la Policía se acercó a las jóvenes y les pidió amablemente que se marcharan, puesto que un vecino había protestado, y ellas acataron sin poner ninguna objeción.