Argentina y España se empeñaron en ofrecer un partido emocionante, que se resolvió en los últimos segundos gracias a un triple del base Pablo Prigioni. Carlos Delfino fue el máximo anotador de la «albiceleste» con 27 puntos, y Luis Scola sumó 22. Por parte del equipo europeo, un magistral Rudy Ferández encestó 31.
La diferencia en la primera mitad la marcaron los lanzamientos triples. Argentina encestó siete triples de 10 intentos, mientras que España se quedó en un pobre tres de 14. Y encima los tres triples fueron del mismo jugador, Rudy Fernández.
Los errores del tiro español permitieron a la selección sudamericana marcharse al descanso con una cómoda ventaja 49-32.
La diferencia para Argentina llegó a ser de 25 puntos, pero la selección española apeló a su conocida furia en el tercer cuarto. Y Fernández lideró con 11 puntos en el parcial una impresionante racha 18-0 a base de robos de balón y contragolpes que dejó el marcador 65-62 con los últimos 10 minutos por jugarse.
Ocho puntos de Scola nada más arrancar el cuarto parcial devolvieron al equipo sudamericano una renta de ocho puntos en el marcador. Pero España, que ya había hecho lo más difícil, siguió peleando e igualó el encuentro a 80 a falta de dos minutos para la conclusión.
Cuando el marcador señalaba 82-81 para Argentina, Prigioni logró un triple cuando sólo restaban 15 segundos, que sentenció el partido.
España, campeón del pasado mundial de Japón, concluye su andadura en sexto lugar. Argentina, que finalizó cuarta en 2006, cayó una posición y clasificó quinta en Turquía.
AP