La amistad inocente entre un hombre y una mujer heterosexuales, y por inocente queremos decir sin ningún tipo de intención o búsqueda sexual de uno para otro, es uno comportamiento que popularmente se considera irreal, imposible, una coexistencia pacífica y platónica que, cuando se da, solo es porque en el fondo se oculta un intenso deseo sexual las más de las veces compartido o eso es lo que muchos quisieran pensar.
Sea como fuere, este dilema fue analizado recientemente por un grupo de científicos de la Universidad de Wisconsin-Eau Claire, en Estados Unidos, para saber qué tanto de verdad existe en dicha consigna popular.
Si quieres seguir leyendo, pulsa aquí.