¿Es posible comer dulces sin engordar? aquí te decimos todo.. te sorprederás

Antojos tenemos todas. Aunque son variados, el común denominador es el deseo apremiante por comer algo dulce. ¿Pero por qué estos antojos son más intensos cuando estamos en plan de perder peso?

Los antojos pueden tener de trasfondo un cuadro de ansiedad, o ser producto de un plan dietético con pocos o nada de carbohidratos. El cuerpo reacciona y nos provoca comer algo con azúcar y grasa. ¿Qué viene a la mente? Por supuesto que no imaginamos una ensalada sino algo que nos hace agua la boca.Pensamos entonces en un postre, un helado, galletas, chocolate o un pancito con mantequilla.

Pero todos ellos contienen carbohidratos simples. Estos, a diferencia de los complejos, llegan más rápido al torrente sanguíneo, liberando mucha insulina.

“El azúcar luego se convierte en glucosa, que es el combustible principal del cuerpo. Si comes demasiados de estos carbohidratos, aumentas el riesgo de ganar peso, reduces tus niveles de energía y corres el riesgo de contraer diabetes”, explica la nutricionista Daniela Espinoza.

¿Entonces, cómo lidiar con los antojos sin ganar kilos o sabotear tu dieta? La clave es realizar elecciones inteligentes.

En el libro “La antidieta” (Editorial Urano), Harvey y Marilyn Diamond aseguran que  la mejor práctica para eliminar la avidez de dulces es el correcto consumo de fruta. “El azúcar de la fruta no ha sido manipulado y proporciona al cuerpo las sustancias que este necesita. Además, con su aporte de fibra, satisface”. Con el azúcar refina, en cualquier forma que se ingiera, sigues sintiendo la sensación de vacío, incluso después de comer mucho.

Así, Vicky Motta, nutricionista clínica especializada en educación en diabetes, nos sugiere tener a la mano una fruta jugosa y dulce. Opciones: mandarina, manzana, pera y melocotón. Si te gustan las frutas secas, sacia tu deseo por algo dulce con 8 pasas o dos guindones  o higos pequeños. O toma un snack con la menor carga calórica posible, como un vaso pequeño de yogur light. Una porción pequeña de gelatina o flan dietéticos también son buenas soluciones para saciar tus antojos.

¿Qué no puedes con tus ganas de comer galletas o una porción de torta? En ese caso, recomienda Vicky Motta, las galletas caseras de avena o quinua son mejor que las procesadas. Y en lugar de una porción de torta con relleno y cobertura es mejor una tajada de queque. O prueba un par de galletas con mermelada dietética.

Pero recuerda que en alimentación no hay dietas mágicas. “Es mejor darse un gusto pequeño y disfrutarlo”, comenta la nutricionista Talía Schvartzman. “Uno de los errores de las dietas, al dejar de lado los carbohidratos, es que te provocan más. Esto nunca se debe hacer, es totalmente contraproducente.  Por eso, es necesario incluirlos, incluso, para bajar de peso; de esa forma evitas la ansiedad”.

Si quieres saber qué tipo de antojos puedes darte de acuerdo con tu estado de salud particular, consulta siempre al nutricionista.