Reprochó la forma como se producen los pronunciamientos de la CIDH, ya que, a su juicio, sólo toman en cuenta la información que aportan Globovisión, El Nacional y El Universal, ante la imposibilidad de entrar al país.
Chaderton manifestó que el secretario general de la OEA propuso que se dé un diálogo entre la organización y la representación venezolana para impedir que el país abandone el organismo.
“Hay una reacción del secretario Insulza que propone que entremos en diálogo con la CIDH. Será el Gobierno venezolano quien diga eso. No son los miembros de la CIDH los que van a ser reconocidos por nosotros como interlocutores válidos”, expresó.
Resaltó que Venezuela está evaluando cuál es su papel dentro de la organización. “Hoy la mayoría (de los defensores de derechos humanos) responden al esquema político que no debería regir a una organización como la CIDH. Todo esto forma parte de una inmensa farsa y de una orquestación muy oportuna. Estas explosiones de denuncias siempre coinciden con procesos electorales y pasa ahora en la cercanía de las elecciones parlamentarias” finalizó.