La organización por la libertad de prensa pidió la «rápida reincorporación de los tres periodistas» denunciados por difamación, quienes afirman «haber sido despedidos debido a su postura política, desfavorable al presidente recién elegido, Michel Martelly».
«En ninguna circunstancia sus convicciones mancillaron la calidad de su trabajo o empañaron su objetividad. Este caso tiene la apariencia de una persecución política», declaró RSF en un comunicado en el que apuntó que «se trata de un muy mal comienzo para el futuro presidente Martelly».
La organización llamó al recién elegido presidente «a tomar una postura clara al respecto» y manifestó su deseo de que «los cinco años de mandato de la nueva presidencia se desarrollen respetando la libertad de prensa y la independencia de las redacciones».
Jackson, Pierre e Innocent fueron citados ante la Justicia por el director general de la cadena del Estado, Pradel Henriquez, quien presentó una denuncia contra ellos por «difamación».
«Henriquez se considera víctima de una campaña de difamación instrumentada por los tres periodistas, suspendidos el pasado 5 de abril», recordó RSF. El directivo les reprocha no haber sabido disociar su tendencia política de su deber profesional.
Los periodistas denunciaron que el tiempo de transmisión concedido gratuitamente por la cadena a Martelly fue sensiblemente superior que el otorgado al candidato Mirlande Manigat.