La medida cautelar anunciada ayer por un tribunal de San José, en el estado de California, impide a Samsung exportar o vender esta tableta en Estados Unidos, al considerar que el diseño del producto viola una patente de Apple.
“Samsung está decepcionado con la decisión”, explica el comunicado, en el que se considera que la medida del tribunal “reducirá la disponibilidad de prestaciones tecnológicas superiores para los consumidores de Estados Unidos”.
“Tomaremos las medidas legales necesarias y no esperamos que la decisión tenga un impacto significativo en nuestras operaciones, ya que contamos con una amplia gama de productos Galaxy Tab”, prosigue el documento.
La prohibición anunciada hoy con respecto a la venta de su tableta en Estados Unidos tampoco pareció preocupar a los inversores, ya que los títulos de Samsung se apreciaron hoy un 2,46 por ciento en la Bolsa de Seúl.
La decisión judicial se produce a raíz de que la estadounidense Apple presentara en julio de 2011 una querella ante el tribunal de San Jose para intentar bloquear la venta de tres modelos de smartphone del fabricante surcoreano, así como de su tableta Galaxy Tab 10.1.
La empresa californiana sostiene en su demanda que Samsung violó sus patentes, incluida la D504,889, que consiste en una forma rectangular con cuatro esquinas redondeadas, una superficie vidriosa uniforme sin ninguna ornamentación y un reborde en torno a la superficie frontal.
El tribunal rechazó la querella el pasado diciembre al cuestionar la validez de las patentes, aunque el Tribunal Federal de Apelaciones ordenó revisar el caso.
Samsung y Apple mantienen una batalla legal a cuenta de las patentes de sus teléfonos y tabletas a través de una treintena de demandas cruzadas interpuestas en tribunales de diez países, en tres continentes diferentes. EFE