Fausto Santos también confirmó que los dos Gobiernos discutirán la posibilidad de que los inmigrantes ecuatorianos que quieran regresar «definitivamente a su país» puedan cambiar sus ahorros sin ningún tipo de restricción.
El Senami planifica y gestiona la política migratoria ecuatoriana ofreciendo, entre otras cosas, asesoría legal o actividades educativas y culturales, además de llevar a cabo una serie de proyectos que acercan la cultura ecuatoriano a los inmigrantes residentes en toda Venezuela.
«La misión es que el ecuatoriano conozca todo lo necesario su país y tenga la sensación de estar cerca de su familia y su territorio», dijo Santos.
Según los cálculos de la institución de inmigración, a día de hoy residen 205.000 ecuatorianos en Venezuela, la comunidad ecuatoriana más grande de todo Latinoamérica, debido, según el Senami, a la cercanía geográfica y a las facilidades que ofrece el Gobierno venezolano a sus vecinos para entrar y salir.
«El nivel de vida que encuentra el ecuatoriano en Venezuela es muy bueno, pero el problema es que ellos trabajan para enviar dinero a Ecuador, algo que les perjudica con el control de cambio», afirmó Santos.
En ese sentido, subrayó que el Senami ya ha realizado una petición a la Comisión de Administración de Divisas de Venezuela (Cadivi) para que flexibilice la remesa de divisas, incluida la de los inmigrante que residen de manera ilegal, unos 2183 según la institución.
De cara al futuro, Santos considera «prioritario» trabajar en torno al acercamiento de la cultura ecuatoriana a Venezuela.
Entre los proyectos, destaca el de ofrecer clases de quichua, idioma nativo de Ecuador, para lo que contarán con la ayuda de la comunidad indígena residente en Venezuela, compuestas por unas 800 personas.
El Senami también trabaja en un proyecto que acercaría la artesanía ecuatoriana, «una de las más importantes de latinoamérica», según Santos, a Venezuela.
Otro de los objetivos es que los ecuatorianos puedan iniciar sus estudios universitarios a distancia, para lo que ya han iniciado conversaciones con las diferentes universidades de ambos países.
Por otro lado, Fausto Santos informó que se está trabajando para crea un salón virtual que permita a los ecuatorianos residentes en Venezuela comunicarse con su país mediante videoconferencias gratuitas.
«Estamos orientados a hacer una pequeña comunidad aquí porque queremos que la gente tenga un vínculo permanente con sus familiares de allí», aseguró Santos.