«No participarán. No hemos hablado de ello. El Consejo de Seguridad de la ONU ha reconocido el sexteto como el líder informal a la hora de abordar el arreglo de todos los aspectos relativos al programa nuclear iraní», señaló Lavrov en rueda de prensa.
Al mismo tiempo reconoció que «es evidente que existe un grupo de países interesados en ayudar a solucionar pacíficamente este antiguo problema. Brasil y Turquía están entre ellos».
El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Manucher Motaki, expresó el martes, en Madrid, la necesidad de ampliar las próximas negociaciones sobre su programa nuclear a otros actores internacionales, como Turquía y Brasil.
Motaki recordó que esos dos países firmaron en junio pasado en Teherán un acuerdo, que prevé el envío a Turquía de uranio iraní enriquecido al 3,5 por ciento para a cambio recibir combustible enriquecido hasta el 20 por ciento, para su uso civil.
El jefe de la diplomacia iraní considera que en las negociaciones podrían estar tanto el llamado Grupo de Viena (formado por EEUU, Francia, Rusia y el Organismo Internacional de la Energía Atómica), como el grupo 5+1 (integrado por los cinco miembros del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania) y también Turquía y Brasil.
Por otra parte, Lavrov expresó su confianza en que Irán participe en las próximas «consultas técnicas» en Viena, en las que se abordará la puesta en marcha de dicho acuerdo de intercambio nuclear.
«Esperamos una respuesta constructiva (…) y que la parte iraní acepte la invitación. La iniciativa de Brasil y Turquía, en relación al suministro de combustible para el reactor de investigación iraní, fue un paso muy conveniente y Rusia lo aplaudió», dijo.
Lavrov espera que el grupo 5+1 celebre un encuentro a nivel de directores políticos en agosto, con vistas a una reunión ministerial en septiembre en Viena.