El Herodes Rojo
La llegada de la navidad se ha convertido en los últimos años para los venezolanos en tiempo de añoranzas y reencuentros familiares, sobre todo para numerosas familias que se han visto divididas por la migración de sus miembros en búsqueda de aliviar sus penas porque son perseguidos políticos, o porque perdieron sus trabajos o porque el gobierno del heredero asfixió a las empresas donde trabajaban.
El comunismo instaurado en Venezuela le ha robado la felicidad de la navidad al pueblo entero, y ahora se la roba a 130 niños que gracias a la iniciativa de un grupo de venezolanos exiliados en Perú llamado Unión Venezolana en Perú, permitiría unir en esta época a los niños con sus padres que luchan en el exilio forzado en este país, pero sin importar cualquier sentimiento el heredero se comporta cual Herodes matando la ilusión del reencuentro les impide la salida del país.
Y propio del cinismo comunista que saben usar, surgen las aberraciones legales para tratar de limpiar el pecado que han cometido al impedir que estos niños viajen y tratan ahora de darle un viraje de ilegalidad a tal acción imputando cargos a miembros de esta fundación en el país, hasta el punto de escuchar a Delcy Rodríguez decir que investigarán hasta lo último este caso en la Asamblea Prostitúyente.
Y seguidamente el poeta feliz se une a la investigación de este hecho, cabe recordarle a estos personajes de la manada de bagres rojos que sería bueno investigaran cuantos niños están acostándose a dormir sin comer en el país a diario, seria bueno que investigaran a cuánto ascienden los niños con altos grados de desnutrición en varias ciudades de Venezuela en la actualidad.
Delcy Tarek deben preguntarse cuantos niños no tendrán una hayaca en sus mesas o simplemente un juguete gracias a la imprecación comunista que ha destruido al país y de la que ellos forman parte y cuales impúdicos se hacen de la vista gorda.
Existen temas más importantes que involucran a los niños que hoy padecen el país por culpa de |la destrucción continuada del mismo por parte de los mismos cínicos que hablan de defender sus derechos, el heredero se consolida como el tirano mayor y cual Herodes mata el sueño de estos niños que quisieron viajar y el de los que están en el país y ven su futuro incierto.
Cual Herodes, el heredero aniquila el futuro, la esperanza de un porvenir mejor y los sumerge en la mas triste navidad de sus vidas, ojalá tarde o temprano no tengan que probar de su propia medicina y vivan en carne propia la letanía de un comunismo trasnochado sanguinario.