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La decisión del presidente de ponerse un traje de verano, que tiene precedentes entre otros mandatarios -incluido él mismo- fue el tema más importante en las redes sociales el jueves. Fue una opción defendida como perfectamente apropiada para esta época del año, y criticada como algo muy poco presidencial al tratar un tema tan serio.
Las opiniones en Twitter no se hicieron esperar:»Con beige hay cambio», dijo alguien. Otro dijo: «La audacia de vestir beige».
Aunque Obama por lo general viste trajes tradicionales oscuros, este año lució un traje beige para Pascua. Pero no estaba discutiendo una posible intervención militar en el Medio Oriente.
Otros de los presidentes que han vestido en público de beige son Bill Clinton, Ronald Reagan, George H.W. Bush, George W. Bush y Dwight Eisenhower. De hecho, George W. Bush tenía un traje que su personal le llamaba el Big Brown. Y decían cosas como: «Oh, no, hoy tiene puesto el Big Brown».
Y para estar acorde con los tiempos, a Franklin D. Roosevelt le gustaban los trajes blancos.
Pero lo que ocurre es que Obama tenía puesto el traje color claro cuando dijo a los reporteros que «todavía no tenemos una estrategia» para una intervención militar en Siria contra el Estados Islámico, un grupo extremista que trata de dominar el Medio Oriente.
«¿La imagen de poder? Se esfumó con este traje», dijo Patsy Cisneros, asesora de imagen de Los Ángeles que ha trabajado con senadores, gobernadores y ejecutivos empresariales. (Todavía no ha logrado asesorar a ningún presidente o candidato presidencial).
«Cuando uno miraba del cuello para abajo, todo era debilidad. Eso no invita a que le presten atención», dijo el viernes.
Una persona a quien el traje beige de Obama no le pareció mal fue Steve Schmidt, estratega republicano que ayudó en la campaña presidencial del senador John McCain en 2008. La misma campaña en que el Comité Nacional Republicano gastó miles en la ropa e imagen de Sarah Palin.
«Creo que es un buen traje», dijo Schmidt por teléfono el viernes desde Park City, Utah. «Ronald Reagan solía ponerse ropa beige y de colores claros con alguna frecuencia, y lucía bien».
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