-El tiempo avanza, el CNE no parece ceder en las condiciones exigidas por la oposición
-Las marchas van a seguir y las detenciones también
-El Sebin busca golpistas hasta en la sopa
-El plan es allanar primero y averiguar después
L. J Hernández
Hace pocos meses o semanas, con los primeros anuncios del CNE, la oposición celebraba un triunfo de la presión como instrumento por excelencia para llegar al ansiado Referendo Revocatorio.
Los analistas se anticipaban a decretar que el gobierno y sus insuficientes afines no resistirían la presión de un pueblo que en más del 69%, estaba dispuesto a darlo todo para asegurar el mecanismo constitucional.
Lo que nunca imaginó la oposición es que desde salas situacionales sentenciaban el fin de las ambiciones opositoras.
Reuniones en secreto y conversaciones del PSUV con delegados del CNE, continuaban casi al ritmo de la proclama opositora.
Capriles, Torrealba y Borges, no conocían -y si lo conocían se hacían los sordos- hasta donde el gobierno y sus conmilitones estaban dispuestos a darlo todo contra la protesta revocatoria.
“No hay, ni habrá Revocatorio este año, ni el otro, ni nunca”, tronaba Diosdado Cabello.
Jorge Rodríguez visitaba al CNE para dejar este mensaje, más que a la oposición, a los rectores y rectoras.
“Ese Referendo está muerto”.
Pero, sorpresivamente, las rectoras oxigenaban la propuesta de la oposición cuando fijaron las fechas.
Vana ilusión. Lo bueno vendría después. Los famosos lapsos eran en dedito a los sepultureros de la iniciativa. Lo premeditaron. Y hasta el rector Rondón quedó, como diría un viejo refranero, listo y alborotado.
Desde la Sala Situacional de Miraflores y sus buenos rentados cubanos salían las órdenes: detener a dirigentes de oposición. La mira estaba en los dirigentes de Voluntad Popular y Primero Justicia. Así cayeron Lester Toledo en el Zulia, Guárate en Maracay y otros dirigentes en varias ciudades. El Sebin buscaba golpistas hasta en la sopa.
Había que allanar primero e investigar después. Eso llevaría el desencanto a las filas opositoras y al desgaste de las marchas. La última marcha fue frustrante.
La oposición no logró lo que aspiraban sus líderes.
El poder del Estado había logrado un efecto, pero ¿hasta dónde se mantendrá la situación?
El conflicto está ahí. Ahora con más profundidad. Para colmo, ya no hablan de diálogo y decretan el fin de la convocatoria de la oposición.
Maduro parece dispuesto a no entregarse. Así desde un sector del chavismo haya quienes lo desean y hasta conversan en privado con la oposición.
El Presidente se prepara para otro viaje: las Naciones Unidas.
Aquí deja una Nación desunida. Partida. Unos que se aferran al poder y otros que luchan para sacar el poder.
El país se desgarra con estos conflictos. Una sociedad desgarrada es una sociedad sin porvenir.
¿Y la iglesia?
Hasta el Papa parece sin ánimo para estimular la iniciativa del diálogo en Venezuela.
En la sacristía, Urosa y Padrón se quedan con la sotana puesta.
Lo del CNE estaba cantado. Lo habían dicho los líderes del PSUV y el propio Presidente de la Republica. El mensaje era claro. Olvídense del revocatorio. Ahora las rectoras con su decisión no hicieron sino confirmar lo dicho por Jorge Rodríguez. El revocatorio 16 descanse en paz. La MUD seguirá con las marchas y denuncias. El sector Oposición tiene una solución. Cobertura del 20 por ciento en más del 50 en el plazo acordado en el CNE.
Las denuncias
Lilian Tintori denunció que su esposo, Leopoldo López, permanecía en una celda sin luz. Freddy Guevara ve a los “sebines” que lo siguen en todos sus movimientos. David Smolansky, alcalde de El Hatillo, se siente acosado por los espías del régimen y de los contralores. Nelson Garate, alcalde de Aragua, se considera un preso del gobernador Tarek y agrega que durante su gestión fue acosado en lo político y lo económico. Lester Toledo, un preso del Sebin y del gobernador Arias Cárdenas. El alcalde de Socopó, en Barinas, vive bajo el cerco del gobernador Adán Chávez.
Por qué no entenderse
Oímos a esos radicales anti diálogo en una especie de anti política y anti país. Ignoran que el conflicto político está arruinando la economía.
En Venezuela hay una situación similar a la de España, ¿y saben que ocurrió en España esta semana? Los grandes adversarios iniciaron el diálogo para un acuerdo. El pacto entre derecha e izquierda está en camino. Los radicales de Iglesias y Errejón se pelean por las redes sociales y como en uno de los tweets Errejón le dice a su compañero Iglesias: “A los poderosos ya les damos miedo y ese no es el reto. Lo es seducir a parte de nuestro pueblo”.
Iglesias responde a su compañero: “En junio dejamos de seducir a 1 millón de personas. Hablando claro y siendo diferentes seducimos más”.
Y aun más radical se torna en el debate con este tweet: “David no venció a Goliat haciéndose el simpático. Implacables en el debate, generosos en la victoria”. Rafa Mayoral. ¿Y monedero qué? Buscando real.