Por ejemplo, cien gramos de cerezas (entre 10 y 12 unidades) tienen 69 calorías. Sin embargo, muchas personas consumen fácilmente 300 ó 400 gramos, aumentando el aporte calórico a 200 o 300 calorías. “Si a esto sumamos una mayor ingesta de bebidas, helados y golosinas, el resultado para el peso puede ser nefasto”, recalca la especialista.
Lo mismo sucede con uvas, cerezas o ananá, que entregan un mayor aporte de calorías, por lo que se deberían consumir con moderación. La nutricionista destaca como opciones con menos calorías a frutas como las naranjas, mandarinas, pomelos o frutillas.
En esta época también se consumen jugos naturales de frutas. La académica de la UNAB alerta que hay que si se incluye la pulpa en la preparación aumenta el aporte de calorías, más aún si se agrega azúcar: “Lo ideal es que sea sólo o con endulzante. Se puede hacer con naranjas, pomelos o jugo de limón. Un vaso de jugo de esas frutas tiene en promedio 70 calorías”.