CVG Alcasa


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Gobierno mantiene su silencio frente a catástrofe de Alcasa, la primera fábrica de aluminio primario en el país

En el tercer piso del edificio administrativo de CVG Alcasa, en la sala de espera de presidencia, un grupo de trabajadores espera el anuncio del presidente Elio Sayago.

Conversan sobre lo que los reúne: no hay insumos para las celdas. No es nuevo para ellos. En el último año se han quedado sin materias primas en no menos de tres oportunidades.

Algunos proponen ir hasta Caracas a exigir al presidente Hugo Chávez, mientras otros especulan de lo inútil que han sido las ruedas de prensa exigiendo recursos.

Pese a la opinión de los trabajadores, el presidente Sayago es optimista. “Hay una situación que hemos venido señalando de una emergencia operativa y financiera que todavía no hemos logrado superar. Tiene que ver con la amenaza de una nueva situación operativa ante la ausencia del fluoruro”.

“Queremos dejar constancia ante los trabajadores que, de nuestra parte, hemos venido haciendo las gestiones para pagar a los proveedores que nos suministran nuestros insumos básicos como fluoruro, coque, brea, criolita, manganeso, magnesio y silicio”.

De esa manera, el gerente introduce el problema que les ocupa y también las soluciones que han estado gestionando.

Maniobra operativa

Si no hay ningún contratiempo en su adquisición, el material estará en Guayana el 17 de agosto. El problema radica en el lapso de espera.

Para garantizar que el pedido llegue a la fábrica en el tiempo estipulado, se debe re-direccionar el dinero aprobado en principio previsto para las empresas chinas.

Dado que no se desembolsó el capital cuando se solicitó (el 23 de mayo de 2011), la empresa no pudo garantizar el almacén. Ahora – indica Sayago – deben gestionar con proveedores más estratégicos geográficamente como México, Estados Unidos e Italia, que traerían el material en menor tiempo.

En el directorio que se reunirá hoy en la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), no habrá ningún inconveniente para concretar la transacción, asegura el presidente.

De resultar satisfactorio este operativo, CVG Alcasa pudiera garantizar contar con 1.000 toneladas de fluoruro que alcanzan para dos meses, así 100 toneladas que llegarían en 8 días, vía aérea.

Mientras tanto, CVG Venalum prestará 10 toneladas de fluoruro que garantizarán cinco días de estabilidad de las celdas. Con el plan de contingencia tratarán de administrar el insumo hasta que llegue el avión con el material. Ése es el plan.

Introspección

La situación era completamente previsible, analiza el gerente. “Alcasa ha hecho las gestiones necesarias, a tiempo, para garantizar los insumos”.

Básicamente –explica- la empresa se ha quedado sin los aditivos por los retardos del Ejecutivo en aprobar las estrategias financieras propuestas por el control obrero, así como por la entrega tardía e insuficiente de los recursos.

De los US$ 80 millones solicitados por Sayago para compra de materia, el ejecutivo aprobó US$ 70 millones para todo el sector aluminio. A Alcasa le correspondió US$ 9 millones, 12% de lo aprobado y 11% de lo solicitado.

El gerente técnico, Randy Contreras, explica que el desbalance se ha producido por las limitaciones en la compra del fluoruro, ocasionando un incremento de 6 grados centígrados en la temperatura de las celdas.

De afuera hacia dentro

Según Sayago, el ministro de Industrias Básicas y Minería, José Khan, no ha respondido a ninguna de las solicitudes. El presidente desconoce la indiferencia del funcionario. No quiso elucubrar pero sí habla de un hecho concreto: desde CVG y Mibam le ordenaron suspender el ingreso de los trabajadores asociados en cooperativas bajo el argumento del incremento de la nómina.

Asegura que no ha tenido contratiempos en su relación con CVG Venalum. De su denuncia en Caracas, sobre los obstáculos que les estaría colocando el canciller Nicolás Maduro, a través de la Fuerza Bolivariana de Trabajadores (FBT) y el gobernador del estado Bolívar, Francisco Rangel Gómez, no ha recibido respuesta.

A su juicio los supuestos obstáculos burocráticos impuestos por gente del “proceso revolucionario” pretenden declarar luego que el control obrero fracasó, como excusa para regresar al viejo modelo de gestión. En su opinión, no se trata de un enfrentamiento entre el oficialismo sino entre los revolucionarios y los sectores disfrazados de “chavismo” para jugar en contra del proceso.

Sayago no descarta solicitar una línea de crédito con empresas transnacionales, eso sí, ni Glencore ni Noble. Ya han adelantado dos reuniones con los clientes nacionales a quienes se les estará solicitando un préstamo a cambio de aluminio primario con el que podrán incorporar celdas.

De acuerdo al líder del control obrero, se trata de una pelea que -está seguro- los trabajadores ganarán “independientemente de que el ministro apruebe o no apruebe, tengan la confianza de que no vamos a dejar morir a Alcasa”.

CIFRAS

– 9 millones de dólares aprobó el Gobierno para CVG Alcasa, apenas 11% de lo solicitado.

– 5 mil toneladas mensuales produce la pionera, requieren producir 7 mil toneladas para mejorar el flujo de caja

– 10 toneladas de fluoruro prestó CVG Venalum a Alcasa

– 100 toneladas de fluoruro solicitaron a empresa mexicana.

Deudas laborales

El presidente de CVG Alcasa, Elio Sayago, informó que la empresa no tiene los recursos ni para cancelar la nómina como tampoco para pagar los intereses de prestaciones y los días adicionales derechos previstos en el artículo 108 de la Ley Orgánica del Trabajo (LOT).

Indicó que hoy, en reunión en la CVG, tratarán el caso y el Ejecutivo tendrá que responder sobre esta deuda. En las gestiones de Alcasa está incluida la búsqueda del capital para honrar la deuda con los trabajadores de CVG Carbonorca.