Escasez de condones amenaza la sexualidad de los venezolanos

   Recorrer varias farmacias en busca de preservativos o tener que pagar altos precios para adquirir el popular producto, es la nueva realidad que viven muchos venezolanos. La dificultad de conseguir pastillas anticonceptivas empezó a exacerbarse a finales del año pasado, ahora, el método anticonceptivo más accesible en el mundo ha comenzado a desaparecer de los anaqueles.

Cada vez se hace más cuesta arriba para los criollos conseguir los contraceptivos más conocidos, tanto el condón como las pastillas. La gerente de programas de la Asociación de Planificación Familiar (PlaFam), Belmar Franceschi, señaló que para la institución el uso del profiláctico es “fundamental”.

“El condón es importante porque es un método que no requiere receta médica y el acceso debería ser más fácil para las personas. También deberían ser económicos para que cualquier tipo de persona pueda adquirirlo”

Asimismo, enfatizó que este producto, a diferencia de otros anticonceptivos, no solo ayuda a prevenir el embarazo no deseado, sino que también protege de un contagio de enfermedades de transmisión sexual. Importar condones debería ser una prioridad para el Estado, así como garantizar su disponibilidad en los locales que los comercialicen, añadió Franceschi.

De acuerdo, con la información manejada por la Organización de Naciones Unidas (ONU), en 2013 Venezuela ocupó el tercer puesto de infecciones de VIH por habitante en Sudamérica después de Paraguay y Brasil. En cuanto a la maternidad, para 2012 fue el segundo país con más cantidad de casos de embarazos adolescentes de la región después de Guyana, cuantificando 83 por cada 1.000 mujeres, según el Banco Mundial.

Una encuesta realizada por el Ministerio de Juventud en 2013 evidenció que 60% de los jóvenes que se protegen sexualmente lo hacen con métodos de barrera como el condón, y que este es el más usado por los adolescentes para evitar la concepción.

Causas

Actualmente no se están produciendo preservativos, o al menos no la cantidad necesaria para suplir todo el mercado, y el año pasado las importaciones disminuyeron considerablemente. El Tiempo publicó un artículo en el que mencionan que las cuentas del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) evidencian una caída de 57% de inversión en condones para el cierre del año pasado. Cuando en 2013 se destinaron $2.282.721 para estos anticonceptivos, en 2014 la cifra bajó a $974.869.

Esta pareciera ser la razón principal de la escasez del producto.

De 10 farmacias de Caracas consultadas por Globovision.com, seis admitieron no tener preservativos disponibles. Varias de estas decidieron ocupar el espacio habitual de los condones con otros artículos como pilas o lubricantes.

En cambio, las cuatro droguerías que sí disponían de los anticonceptivos señalaron que se les ha hecho difícil conseguirlos. “Nuestros proveedores nos dicen que no tienen y que no saben cuándo les llegarán. Actualmente solo nos quedan dos cajas de tres unidades de la marca Sultán”, explicó la encargada de uno de los establecimientos que prefirió no ser identificada.

Néstor Silva, encargado de una farmacia, puntualizó que solo les queda una docena y que, aunque hacen el pedido todas las semanas, no les llegan desde principios de enero. Por su parte, Amarelis López, manifestó que las droguerías que despachan en su local no tienen, y por primera vez, una empresa con la que no habían negociado antes les distribuyó 113 cajas de tres cada una.

Precios en aumento

Los condones que se consiguen en el mercado cuestan entre Bs.100 y Bs.350, dependiendo de la marca y de la cantidad que trae la caja. La presentación de tres unidades puede tener un precio hasta de Bs.150, mientras que la de seis ronda los 300.

A raíz de la poca distribución de preservativos de látex, algunas personas se han aprovechado de la situación y han empezado a comercializarlos a través de páginas webs como Mercado Libre. En algunos casos el valor del producto se duplica o triplica.

¿Abstinencia como opción?

Franceschi aseguró que en esta situación la abstinencia no es una alternativa. Decirle a alguien que se abstenga porque no hay métodos anticonceptivos no es “el deber ser”.

“¿Cómo le dices a una persona que no tenga relaciones porque no hay condones? La sexualidad forma parte del ser humano desde que nacemos. El sexo no solamente se hace por reproducción, sino también por placer”.

Fuente: Andrea Vera Mondazzi