Por otro lado, los familiares de los internos que tenían 4 días en las puertas del penal para impedir traslados fueron dispersados por la Guardia Nacional con bombas lacrimógenas y perdigones, asimismo denunciaron violencia por parte de este ente judicial y llegaron a decir que el número de muertos ha aumentado, a pesar de no contar con información exacta.
La directora de Protección de Derechos Fundamentales, María Mercedes Bherte, refirió que su institución está vigilante de los derechos humanos en el procedimiento y del uso proporcional de la fuerza.
También llamó a los reclusos y los familiares para que no se resistan a la acción e informó que casi a las nueve de la mañana todavía algunos internos se resistían a bajar a los patios.