¡Atención!… Diez cosas que debes evitar después de los «temidos» 30

   Los años pasan y hoy nada que hacer para evitarlo. Cuando somos jóvenes queremos rápido crecer y vivir cosas de grandes, pero cuando llega el momento de serlo, muchos anhelan volver a la infancia. Conforme vamos creciendo, la sociedad nos va indicando las pautas por las cuales nos movemos; hay cosas que aún son aceptables cuando se tienen 20 años, pero que a los 30 no parecen ni graciosas. Comportamientos que equivalen a tener una vida útil y saludable, puesto que se espera que se mejore conforme se envejece.

Además, las féminas siempre se encuentran en la búsqueda de un hombre que actúe conforme a su edad. Así que, si tú estás a punto de entrar al «club de los 30» o ya eres parte, sigue estos consejos para que no caigas en actitudes que más que joviales puedan parecer infantiles. Con información de askmen.com y una nota publicada en De10.mx.

1. ¡Adiós comida chatarra! Hay que reconocer que los años pesan, y con la edad vienen también grandes posibilidades de terribles enfermedades como la diabetes y la obesidad.

Para que no tengas que sufrir ni preocuparte por eso, empieza a cambiar los tacos, las hamburguesas, las sopas rápidas y los hot dogs del súper por comida más saludable. No es difícil, sólo es cuestión de organización. Recuerda que a los 30 el metabolismo cambia y tarda mucho más en procesar los alimentos.

2. No conduzcas de manera imprudente. De acuerdo con el Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes, al año mueren más de 24 mil personas en accidentes vehiculares, en México.

La imprudencia en el volante, generalmente se asocia con el comportamiento de un joven temerario e inconsciente. Si no quieres que piensen eso de ti o terminar en un hospital, modera tu forma de manejar.

3. No juegues videojuegos de manera obsesiva. Sabemos lo divertido que es sentarte frente a la consola y pasar horas de diversión con juegos que cada vez son más interesantes y didácticos; también lo entretenido que es jugar con el celular mientras vas en el camión, metro o combo.

Pero «aguas», si pasas todo el día pensando en que tienes que «pasar al siguiente mundo» y le dedicas más horas de las que tienes disponible, algo anda mal. Necesitas establecer prioridades y progresar en la vida real.

4. Vivir en un cuarto que parece de adolescente. Si quieres que la gente te vea como un adulto, hay que portarse como tal. Y precisamente, se espera que una persona, a los 30 años, ya haya desarrollado un gusto y estilo que se refleja en su hogar.

Si sigues teniendo pósters de mujeres desnudas y cerveza pegados en tu pared, no dudes que la gente piensa que te falta madurez (y puede ser una suposición bastante acertada). Haz el esfuerzo de mantener tu casa limpia, en orden, presentándote como un adulto.

5. Tatúate. Tranquilo, no estamos diciendo que esté mal tatuarse antes de los treinta ni que ahora es obligatorio que lo hagas, es sólo que cuando llegas a la tercera década de vida es más probable que tengas una decisión más fundamentada de lo que quieres tener en la piel permanentemente, que cuando tienes veinte y tomas una decisión precipitada.

6. No te emborraches. No es que no tomes, es sólo cuestión de que lo hagas con moderación. Recuerda que para nadie es cómodo tener que estar «cuidando borrachos» y seguro para ti no será buena la resaca del día siguiente, porque aunque quieras ya no aguantas como cuando tenías veinte. Por salud y por una convivencia sana, es importante no tomar en exceso.

7. No derroches dinero. Piensa en tu presente, pero también en tu futuro. Ahorrar no sólo te puede ayudar a sacarte de un imprevisto sino a tener una vejez digna, libre de apuros económicos. Los hombres más ricos lo son porque saben ahorrar e invertir.

8. No sigas en un trabajo que no te gusta. ¿Estás a gusto en el lugar donde te estás desarrollando profesionalmente? ¿Te estás desarrollando profesionalmente? Si tienes 30 años y no estás haciendo el trabajo de tus sueños, lo más recomendable es que busques aquél que se le parezca más si no encuentras el indicado. Piensa que ya has esperado demasiado y es tiempo de hacer cambios en beneficio de nuestra felicidad.

9. No te cierres. Hablamos del entorno social. Ser políticamente correcto te abrirá muchas puertas que te pueden beneficiar en varios aspectos de la vida. Si amplias tus horizontes sociales, estás ampliando tu posibilidades de éxito. Una personalidad abierta, siempre será cautivadora.

10. No te vistas como un adolescente. Aunque no lo creas, más importante que tu personalidad o del trabajo que tengas en este momento es la forma en que te vistes.

Recuerda que lo primero que ve la gente de nosotros es la imagen, y en base a ella toman decisiones sobre cómo te tratan. Aunque suene discriminatorio, así funciona. Bien dice: «la primera impresión es la que cuenta». Y a los treinta, se espera mucho más de ti que a los veinte.

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