ONU inicia investigación sobre planta nuclear averiada

   Una misión internacional comenzó el martes en Japón una pesquisa sobre el complejo nuclear que tiene fugas radiactivas y está inundado, en momentos en que ha surgido información sobre la gravedad de la crisis en los primeros días posteriores al terremoto y maremoto del 11 de marzo.

El equipo de expertos nucleares de la ONU se reunió con autoridades japonesas e inspeccionará en los próximos días la planta Dai-ichi de Fukushima para investigar el peor accidente nuclear desde el ocurrido en 1986 en Chernóbil.

El grupo también evaluará las acciones que ha emprendido Tokio para estabilizar el complejo a más tardar a principios del año entrante, fecha a la que se comprometieron las autoridades del país.

El gobierno japonés, que ha prometido la cooperación con los expertos de la Organización Internacional de Energía Atómica también anunció que efectuaría su pesquisa propia sobre la crisis y designó a un experto de Tokio para que encabece a la comisión investigadora. La OIEA tiene sus oficinas centrales en Viena.

La administradora de la planta, Tokyo Electric Power Co., dio a conocer nueva información, según la cual se fundieron la mayoría de las barras de combustible en los primeros días de la crisis en las unidades 2 y 3 de la planta.

Esta situación se había sospechado pero no confirmado y la información sugiere que Japón estuvo más cerca de una fuga radiactiva mayor que lo que habían reconocido las autoridades en un principio. La Tepco anunció la semana pasada conclusiones similares sobre la Unidad 1.

El combustible en tres de los seis reactores de la planta comenzó a fundirse después del maremoto del 11 de marzo averiara los sistemas de enfriamiento. Esta avería propició enormes descargas de radiación a la atmósfera.

Persisten las fugas en la planta, pero a niveles mucho menores que las ocurridos después del accidente y las autoridades japonesas confían en lograr un «apagado frío» de la instalación y parar todas las fugas en enero a más tardar.